Pasar las vacaciones en un camping de la Val d’Aran es una opción escogida por cientos de nuestros visitantes anualmente. Naturaleza, cuidadas instalaciones, libertad, vida en familia y espacios plenamente integrados en el entorno natural son los principales atractivos de esta modalidad que se ha afianzado en el valle como apuesta turística de valor y que cuenta cada vez con más adeptos.
Foto: Verneda Camping Mountain Resort
La oferta campista incluye más de 2300 plazas repartidas entre los 8 campings de la Val d’Aran. El viajero puede optar por alojamientos de diferente tipología, desde bungalows, cabañas de madera o tipis hasta mini apartamentos.
Todos ellos son ideales para unas vacaciones en familia, ya que incluyen todas las comodidades: wifi, calefacción y agua caliente, terraza propia, cocinas equipadas, televisor… Además, los campings de la Val d’Aran disponen de amplias áreas con parcelas para los entusiastas de la acampada o el autocaravaning.
Estos últimos también tienen opción de reservar plaza en el área de servicios y parking para autocaravanas y vehículos situada a las afueras de Vielha, el Val d’Aran Camper Park.
Equipados y seguros
Siguiendo la tendencia del sector, los establecimientos incorporan continuas innovaciones en sus instalaciones, adaptándolas a las nuevas necesidades y exigencias de los viajeros. Esta inversión redunda en una mejora constante tanto de los equipamientos como de la seguridad y vigilancia.
Foto: Bedura Park
En los espacios comunes es habitual encontrar restaurante, piscina, supermercado, zonas para barbacoa, parque infantil y espacios recreativos. Además, la mayoría dispone de parking y servicio de lavandería.
Más allá de la acampada, estas cuidadas instalaciones les sitúan más cercanos al nuevo concepto del glamping, nacido de la unión de dos términos: glamour y camping. Algunos establecimientos han optado por esta fórmula que va abriéndose brecha en el mundo del turismo evolucionando hacia la tipificación de resort.
Integrados en el entorno natural
La vida en plena naturaleza es uno de los principales atractivos del camping, siempre en fusión con el medio natural. Los establecimientos araneses se encuentran ubicados en el primer enclave de montaña acreditado como destino sostenible Biosphere, certificación que pone en valor el medio ambiente, como uno de los grandes patrimonios del territorio.
En este valle marcado por el curso del río Garona, los campings han encontrado junto a éste o a sus afluentes, enclaves perfectos para ubicarse. Rodeados de densos bosques de hayas, abetos y robles y extensos prados verdes, son auténticos espacios temáticos de naturaleza.
Vacaciones en familia
El camping es un alojamiento ideal para convivir y compartir momentos de ocio y diversión con la familia, en especial cuando hay niños. Muchos de ellos, incluso están adaptados y permiten que puedas llevarte tu mascota. Las instalaciones están completamente pensadas para la vida familiar, con un entorno seguro para los más pequeños, donde aprenden y disfrutan de sus primeras experiencias de libertad y autonomía.
Los campings araneses cuentan con espacios para juegos infantiles y lugares comunes para compartir con otros huéspedes, relacionarse y hacer amigos. Además, en verano se organizan actividades familiares como salidas y excursiones, talleres, gincanas y juegos para niños, torneos deportivos y espectáculos de animación para todos los públicos como conciertos y actuaciones, experiencias gastronómicas, verbenas, fiestas y bailes
A todo ello se le suma la amplia oferta complementaria de ocio de la Val d’Aran, que cuenta con 41 empresas de turismo activo, una excelente propuesta gastronómica, el parque de fauna autóctona Aran Park, una impresionante muestra de iglesias románicas, museos y otros equipamientos culturales.
Adaptación a la situación “post covid”
Durante estas últimas semanas, los campings de la Val d’Aran se han volcado en ponerse al día con las medidas de seguridad necesarias para garantizar la prevención, salubridad. Además, los grandes espacios y la proximidad de zonas naturales garantizan la facilidad del distanciamiento social.
Los que tienen previsto abrir esta temporada estival están adaptando y redefiniendo espacios y distancias, mejorando los sistemas de limpieza y desinfección y redactando nuevas normativas para los clientes y el uso de las instalaciones.