Los Ojos del Diablo o de Júpiter, es una cascada espectacular y un fenómeno excepcional, ya que son las aguas del glaciar del Aneto que desaparecen en el Forau d’Aigualluts, en el valle de Benasque, y reaparecen cerca de la Artiga de Lin, en Val d’Aran, tras recorrer más de 4 kilómetros subterráneos. Se accede desde es Bordes, por una pista asfaltada que, sin embargo, está cerrada los meses de invierno a causa de los aludes que bajan cada año en época de nieve.
Desde el balcón protegido con baranda y las piedras altas de delante de la cascada podremos realizar magníficas fotografías de esta cascada de múltiples chorros, cuyas aguas glaciares y del deshielo tienen más o menos volumen en función de la época del año, siendo especialmente espectacular durantes los dos meses del deshielo, entre abril y mayo. En el acceso a los Ojos del Diablo hay un espacio habilitado para estacionar el vehículo, y en el trayecto de la pista asfaltada hay un bonito ‘merendero’ con barbacoas y mesas en la ribera del río Joel, además de un refugio-brasería
Varios tramos del río Joèu están habilitados y clasificados para la pesca sin muerte, y se pueden encontrar en el mapa de pesca que edita cada temporada el Gobierno aranés, junto a la información para la adquisición de tickets y permisos para los pescadores federados y/o asociados. En varios puntos se puede observar la bajada de aludes del invierno, coincidiendo con algunos barrancos por donde bajan las aguas de las nieves, formando en ocasiones bonitos chorros y arroyos en los márgenes de la pista asfaltada.