Situado a 1490m de altitud en el Alto Aran, este es el pueblo habitado más alto del Valle. Uno de sus edificios de arquitectura popular acoge el interesante museo Eth Corrau, que alberga más de 2500 piezas que muestran la vida cotidiana y los objetos propios de la economia tradicional aranesa. Destaca también la iglesia parroquial de Sant Feliu del siglo XIII, aunque modificada en época moderna. A un kilómetro hacia el norte, en un ensanchamiento del valle del rio Unhola, se encuentra la ermita de Santa Margarida.