Destaca en lo alto la iglesia románica de Santa María de Arties del siglo XII, con su elegante torre gótica de cinco pisos, con cubierta piramidal de pizarra que aloja un gran reloj. Sorprende la riqueza de su interior, presidido por el magnífico retablo mayor, gótico del siglo XV, dedicado a la Virgen Maria. Y el amplio conjunto de pinturas murales renacentistas que decoran parte de sus las bóvedas y muros, representando con vivos colores, diversas escenas, entre las que destaca por su extensión y fuerza expresionista un aterrador Juicio Final.
Al otro extremo del pueblo, se halla la iglesia de Sant Joan, en este caso de estilo gótico y actualmente sala d’exposiciones del Museu dera Val d’Aran.
Su interesante casco urbano cuenta con destacables casas renacentistas de los siglos XVI y XVII, como Çò de Paulet o la torre y capilla privada de la antigua casa solariega de los Portolà, hoy integrados al Parador de Arties.