Capital de la Val d’Aran, Vielha es una pequeña ciudad pirenaica que alberga el 40% de la población del valle y está situada a 974 m de altura. Rodeada de cumbres que superan los 2000 m, se empezó a construir en el ensanchamiento que forma el valle del río Garona, en su punto de unión con el río Nere, que atraviesa la población.
Sus calles y edificios nuevos forman un interesante núcleo comercial donde podrás encontrar todo tipo de comercios y en especial de deportes de aventura, alta montaña y nieve y productos artesanos de Val d’Aran, además de tiendas de moda, supermercados, un hospital (espitau) y el complejo deportivo Palai de Gèu. Las avenidas más grandes contrastan con las calles estrechas y las casas antiguas de su casco viejo que es también un lugar ideal para degustar variadas ofertas culinarias en sus muchos restaurantes con encanto, disfrutar de sus populares rutas de pinchos o tomar una copa de noche.
Visitas culturales
La iglesia de Sant Miquèu, dedicada al santo que fue también príncipe, configura el centro de Vielha junto al edificio porticado del Ayuntamiento, la Oficina de Turismo y el edificio de Correos que en su interior se encuentra el preciado Cristo de Mijaran. Se cree que este busto de madera es el único fragmento que se conserva de la escena de la bajada de la Cruz del siglo XII y realizada por uno de los maestros del Taller de Erill del románico Lombardo que se instaló en el vecino valle de Boí. Las pinturas góticas y barrocas que se conservan en la iglesia parroquial de Vielha son otros tesoros que no debes perderte de su interior, mientras que en el exterior destaca su imponente torre octogonal rematada con un esbelto campanario de pizarra, típico de Val d’Aran.
Pero Vielha tiene otros lugares de visita obligada: el Museo Etnológico, la casa señorial Ço de Rodès y el Museo de la Lana. En el primero, ubicado en la Torre del General Martinón que es una casa del siglo XVII con interesantes ventanas renacentistas, podrás descubrir en detalle la apasionante historia de Val d’Aran. Junto a este museo, también en la calle Mayor, se encuentra la preciosa casa señorial Ço de Rodès, recientemente restaurada. Unas calles más arriba, sin dejar el casco viejo, hay otro edificio histórico que merece la pena visitarse, el Museo de la Lana, en el que se puede ver una teledora Mülle Jenny, que fue clave en los talleres textiles durante la Revolución Industrial, y que muestra el auge que tuvo este sector en Val d’Aran durante el siglo XIX.
Recorridos a pie
A partir de la capital aranesa se pueden realizar varios itinerarios de gran belleza para recorrer a pie gracias a su situación céntrica dentro del Valle. Vielha es un auténtico cruce de caminos, donde confluyen la N-230 tras atravesar el túnel, hacia Francia por el norte, o hacia la Ribagorza y Lleida en dirección sur; y la C-28 que sube hacia Baqueira y cruza el Port de la Bonaigua hacia el Pallars. El Camín Reiau nos lleva hacia el Alto Aran en un sentido, o hacia el Medio y el Bajo Aran, si se coge desde detrás del Palai de Gèu. Y a la salida de Vielha, en dirección Francia, se encuentran los restos del santuario de Mijaran, con el nuevo edificio adosado, donde los conselhers i el Sindic d’Aran toman posesión de sus cargos en el Conselh Generau, como ya lo hacían en el siglo XIII.
En la Boca Sur del Túnel de Vielha, en la zona del antiguo hospital de Santo Nicolau de los Portelhs, se encuentra la capilla de Santa Quitèria. Se trata de una pequeña ermita en la cual cada 22 de mayo se celebra una tradicional romería organizada por el Ayuntamiento de Vielha y Mijaran. La devoción a Santa Quitèria es bien extendida por todo el Pirineo y Occitania, porque según la tradición esta santa, nacida en Portugal, fue asesinada en el s. IV en Francia durante su peregrinaje a Roma. En el encuentro que coincide con la llegada del buen tiempo, cuándo el puerto es transitable y está sin nieve, asisten tanto araneses como ribagorzanos. Desde la boca sur a la boca norte del túnel se puede realizar un interesante recorrido apto para senderistas avanzados pasando por el collado y tuca del Puerto.